Cuida tu salud financiera

Cuida tu salud financiera
Cuida tu salud financiera

Cuida tu salud financiera, es así como tener una buena salud física. Necesita de buenos hábitos alimenticios, una dieta balanceada y ejercicio constante. Una buena salud financiera requiere de autodisciplina, buenos hábitos financieros y un plan de acción.

Recomendaciones que sirven para una buena salud financiera:

Crear un presupuesto personal

Para fortalecer tus finanzas, no necesitas ser un experto, pero si debes realizar un presupuesto mensual. Para ello se debe examinar y calcular cuáles son los ingresos y consumos mensuales. Y para llevar el control del presupuesto, es necesario registrar diariamente los gastos. Y asegurarse de que estos gastos no excedan los ingresos.

Una vez que se tenga un presupuesto, se recomienda:

Reducir gastos que no son precisos.

Depositar una parte de los ingresos mensuales en una cuenta de ahorros.

Revisar y hacer los ajustes al presupuesto mensual.

Plan financiero para cancelar las deudas

Las deudas son compromisos financieros obtenidas voluntariamente, para cubrir necesidades del diario vivir.  Como pueden ser alquiler, planes telefónicos, servicios públicos, prestamos, tarjetas de crédito, entre otras. Mensualmente se debe dividir el dinero para pagar deudas aparte. Es por esta razón, que la disminución de la deuda es un factor fundamental de la salud financiera.

Salud financiera para alcanzar las metas
Salud financiera para alcanzar las metas

Establecer metas financieras

Una vez se cuente con un presupuesto y un plan mensual para pagar las deudas, se recomienda establecer metas financieras a largo plazo. Muchos especialistas financieros recomiendan como meta principal ahorrar para la jubilación como empleados.

También se recomienda crear un fondo de ahorro especifico, para inversión y creación de empresas. En ocasiones el conocimiento financiero de las personas tiene poco alcance. No es igual colocar como meta principal, ahorrar para sobrevivir en la vejez, a poner de meta: lograr la Libertad Financiera a los cuarenta años. Para alcanzarla se necesita trabajar arduamente en el presente. Y alcanzar un plan financiero para obtener como resultado un futuro financiero prospero.