Fue un placer atenderle. Productividad en el trabajo. I parte

Atenderle es un placer.
Atenderle es un placer.

Fue un placer atenderle. Bonita frase. Pero si la analizamos mejor, no siempre es así. Como se explica la incompetencia de un restaurante (es el ejemplo) cuando todo se echa a perder desde que toman mal la orden. Solo hay que analizar a todos los culpables, y encontrar su equivalente en todas las áreas de desempeño profesional. Esto quizá nos deje una buena lección de productividad en el trabajo.

Fue un placer… Empecemos por el cliente.

Claro, se supone que el cliente siempre tiene la razón. Pero si el cliente no se queja por el mal servicio desde un principio, es probable que los errores se vayan acumulando. Y una gran bola de nieve acabe por implicarnos en la culpabilidad.

Muchos señalan lo peligroso que puede resultar quejarse en un restaurante, sobre todo cuando no podemos verificar que la comida llegue a nuestra mesa sin pasar por toda clase de fluidos y secreciones corporales de un mesero vengativo.

Pero el principal error es pensar que quejarse implica hacer un escándalo, romper platos e insultar a la progenitora de todo el personal presente. Hay tres formas de quejarse con elegancia y sin tanto riesgo de encontrar una sorpresa en nuestro plato, desagradable.

Fue un placer... No tanto
Fue un placer… No tanto

Sé discreto: llama al mesero a tu lado, señálale amistosamente de que hay un error con los platos, se confundió. Una pequeña sonrisa no está demás.

Felicítale mientras te quejas: puedes decirle “estos camarones huelen mal y se deshacen, ¿Podrías sustituirlo? Si es posible, tráenos algo más de este pan de ajo, esta bueno”.

Dirige la queja hacia alguien más: mejor construye tu queja de este modo: “Creo que él esta enamorado. Se le olvidó mandar mi carne a la mesa en cuanto estuvo lista, ¿podrías pedirle que me la caliente un poco?”

No dejes propina: es un error dejar propina cuando recibimos un mal servicio. Si aprendemos a disciplinar nuestra conciencia a solo reconocer un buen trabajo, será más fácil encontrar a quien lo haga bien.

Continua…segunda parte mesero, cocinero y el gerente.