Nos encontramos en la segunda ley del liderazgo, como parte de la serie de Posts enfocados a las 21 leyes irrefutables del liderazgo, el libro Best Seller de John Maxwell. Este libro es considerado una de las joyas de este rubro, por lo que todo aquel que busque ser líder completamente debería leerlo. En este caso hablaremos de la segunda ley, la ley de la influencia.
Diferencia entre un líder y un gerente o administrador
Esta es una ley que se enfoca a la forma en la que se obtiene y se gana el liderazgo. Debemos olvidar eso de que todos los jefes, gerentes, administradores y empresarios son líderes. Separar los términos liderazgo y gerente es un paso muy importante, ya que un gerente es aquel que de forma eficiente dirige las operaciones de una empresa o negocio. En cambio, un líder es aquel que también es capaz de influir en las personas.
La ley de la influencia
Para describir esta ley, John Maxwell nos regala la siguiente frase:
“La verdadera medida de tu liderazgo es la influencia. Nada más y nada menos”
El liderazgo es un aspecto que no se puede transmitir, sino que se gana con arduo trabajo y esmero. Es por ello que un buen líder tiende a influenciar enormemente a quienes les rodean. Se puede definir a un líder como aquel a quien las personas buscan y siguen con el fin de aprender lo que hizo para estar allí, de este modo se ve la influencia que puede llegar a tener un líder.
Es por ello, que a lo largo de la historia muchas personas han utilizado esta influencia con distintos motivos; por ello vemos líderes con aspiraciones buenas y líderes con aspiraciones malas, siendo ambos capaces de dirigir a las personas hacia donde desean.
¿Qué podemos concluir de esta ley?
Para concluir la ley de la influencia podemos decir que un error común es pensar que todo aquel con un puesto privilegiado, que tiene conocimiento extenso en una materia o que siempre está primero es un líder. En cambio un líder es quien se esmera y trabaja duro para superarse y enrumbarse hacia el éxito.
En el próximo Post hablaremos de la tercera ley irrefutable del liderazgo, la ley del proceso. Recuerda seguirnos en redes si deseas interactuar con nosotros y estar al tanto de nuevas publicaciones.
