Devolver una película al videoclub, así inicia Netflix. Una empresa nacida hace veinte años a consecuencia de un problema que parece anacrónico. Y es que, así comienza la historia de Reed Hasting su creador.
Cuentan que a Reed se le ocurrió crear esta empresa que envié DVD a domicilio, después de que alquilo la película Apollo 12 en un videoclub, y no la pudo devolver por que la perdió.
Apenado tuvo que ir al local y pagar una multa de cuarenta dólares, generando en él cierta vergüenza. Pero también la motivación de pensar como cambiar el mercado.
Inicio de Netflix
Su creador comenzó a investigar de como crear un negocio de alquiler de películas por correo postal. Hasta entonces no sabía nada de DVD, y un amigo le dijo que esa tecnología estaba llegando. Se acerco a un Tower Records en California, y se envió a sí mismo algunos Cd. Solo el disco en un sobre. Al pasar veinticuatro horas el correo llego a su casa.
El veintinueve de agosto de mil novecientos noventa y siete, la compañía se estableció en Delaware, Estados Unidos. Con el nombre de Kibble, luego muto a NetFlix.com, para finalmente quedar solo como Netflix. Luego de una década en el mercado, la empresa cambio el sentido de su negocio, siendo ahora distribuidora de sus contenidos por internet.
Reed Hastings constituiría junto con Marc Randolph la empresa, como un videoclub con una plataforma de video vía online o por correo postal. Que le suministra al suscriptor una cantidad ilimitada de rentas de las películas y series de su catálogo.
La revolución de Netflix
No obstante, la verdadera revolución, llegaría con la incursión de la tecnología de streaming, mediante la cual los usuarios podían ver películas y series online mediante una cuota mensual.
Otra de las claves del éxito de Netflix es que, como servicio, habría sido limitado por la rápida competencia, quienes podrían comprar también derechos para distribuir material. Así que, por ello, apeló a la creación de series y películas propias, que solo pueden verse desde su plataforma.
Nunca es tarde para perseguir un sueño. Construye tu propia historia. ¡Atrévete a emprender!
