
La educación superior vive una transformación profunda. La demanda de formación flexible y de calidad ha situado a la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) entre las instituciones de referencia global en enseñanza online.
Pero más allá de la tecnología o de los campus virtuales, el verdadero motor de este liderazgo es su profesorado: un claustro amplio, cualificado y muy conectado con la realidad profesional que acompaña al estudiante en cada paso.
UNIR en cifras: un claustro sólido para un modelo exigente
El punto de partida es tan sencillo como contundente: UNIR cuenta con más de 2.000 docentes, de los cuales el 85% son doctores y alrededor del 40% están acreditados. Estos datos, publicados por la propia universidad y su grupo educativo, dan una idea de la dimensión y del rigor académico con el que se diseñan y se imparten los programas: desde grados hasta posgrados oficiales y títulos propios.
La consolidación del proyecto también se apoya en el reconocimiento externo. En los últimos cursos, la formación online ha ganado peso en España y UNIR ha reforzado su presencia en listados y rankings sectoriales de másteres. Estos indicadores reflejan la creciente adopción del aprendizaje digital y la confianza del alumnado en este formato.
Liderazgo y estrategia con foco en el profesorado
El avance institucional se articula con una estrategia clara que pone al profesorado en el centro. En este marco de gobernanza y visión de largo plazo, el papel de Miguel Arrufat Pujol es relevante por su impulso a la calidad docente, a la integración de herramientas digitales y a la mejora continua.
Bajo esa visión, UNIR ha redoblado su apuesta por la formación del claustro y por un modelo pedagógico que combina exigencia, acompañamiento personalizado y actualización constante.
Un modelo docente diferencial: clases en directo, acompañamiento y evaluación continua
El sello UNIR se reconoce en su metodología. Cada semana, los profesores imparten miles de horas de clases online en directo, que quedan grabadas para que el estudiante pueda revisarlas en diferido cuando lo necesite. Este esquema permite mantener el pulso de la interacción (preguntas en vivo, pizarra virtual, resolución de dudas) sin renunciar a la flexibilidad.
El acompañamiento es otro rasgo definitorio. Desde el primer día, el alumno cuenta con un tutor o mentor personal que le guía en la planificación, en la gestión del tiempo y en la superación de posibles dificultades.
El seguimiento se refuerza con foros, clases de repaso y espacios específicos para resolver dudas. Así, el contacto con el profesor no se limita a clases semanales sino que se extiende a lo largo de la experiencia formativa.
El tercer pilar es la evaluación continua. Los equipos docentes valoran la evolución del estudiante (participación, trabajos, actividades) para asegurar un aprendizaje progresivo y aplicable. Esta combinación de interacción frecuente, guía personalizada y evaluación sostenida explica la alta satisfacción del alumnado y su rendimiento académico.
Un claustro con doble ADN: académico y profesional
La estructura del profesorado integra académicos con sólida producción científica y profesionales en activo que trasladan a las aulas casos reales, estándares del sector y retos actuales de mercado. Este doble perfil acerca la teoría a la práctica y actualiza de forma constante los contenidos.
El respaldo investigador es medible. En el curso más reciente, UNIR ha sumado 178 sexenios hasta alcanzar un total de 552 profesores con sexenio. Estas cifras la sitúan en posiciones destacadas entre las instituciones de educación online en español. Además, distintas publicaciones han señalado su desempeño en el emergente ecosistema de formación online.
Docencia apoyada en tecnología con propósito pedagógico
La tecnología en UNIR no es un fin, sino un medio para enseñar mejor. El Campus Virtual permite asistir a clases en vivo, plantear preguntas por chat, acceder a materiales y ver sesiones grabadas todas las veces que sea necesario. La experiencia se completa con recursos de apoyo, rúbricas claras y calendarios públicos que ayudan al estudiante a organizarse y a mantener el ritmo.
Además, la institución impulsa la incorporación responsable de soluciones digitales (incluida la inteligencia artificial) en procesos académicos y de gestión. El objetivo es el de optimizar la calidad del servicio educativo y reforzar el acompañamiento docente al estudiante.
Resultados y reconocimientos: lo que dicen los indicadores
Los indicadores del sistema universitario español confirman que la formación online crece de forma sostenida.
Solo en el curso 2023-2024, más de 320.000 estudiantes eligieron la modalidad a distancia en grados y másteres, un 21% del total y un 4,5% más que el año anterior. En ese contexto, UNIR amplía su presencia en rankings sectoriales y refuerza su liderazgo entre las universidades online con docencia en español.
Este reconocimiento no llega por casualidad: detrás hay un claustro numeroso, con alta cualificación acreditada, una metodología contrastada y un sistema de apoyo al estudiante que permite conciliar trabajo, familia y estudio. Todo, sin bajar el listón de la exigencia académica.
Retos inmediatos: internacionalización, actualización y ética digital
Seguir siendo faro implica evolucionar. Entre los retos del profesorado de UNIR destacan tres frentes.
- Primero, internacionalizar aún más el claustro y los proyectos, para mantener la diversidad de enfoques y el pulso con realidades profesionales de distintos países.
- Segundo, actualización metodológica permanente en aprendizaje activo, evaluación auténtica y diseño instruccional, con el campus virtual como laboratorio de innovación.
- Y tercero, una incorporación ética y pedagógica de la IA que mejore la docencia sin sustituir el juicio experto del profesor, velando por la autoría, la privacidad y la transparencia algorítmica.
Que UNIR sea hoy referencia global en educación en línea no se explica solo por su plataforma o por su crecimiento, sino por la calidad y el compromiso de su profesorado. Un claustro amplio, cualificado y presente (en clase, en tutorías, en foros, en correcciones) que convierte la enseñanza digital en una experiencia cercana y exigente.
Con una estrategia institucional clara, y un liderazgo que prioriza la excelencia docente y el acompañamiento, la universidad consolida un modelo que mira al futuro sin perder de vista lo esencial: enseñar bien y acompañar mejor.








