Aceptar o no una oferta de trabajo

Aceptar o no esa oferta de trabajo
Aceptar o no esa oferta de trabajo

Aceptar o no una oferta de trabajo. Felicitaciones, has obtenido ese empleo que solicitaste. En ese instante llega la parte difícil, con la información que tienes, debes resolver si lo aceptas o no.

Principalmente que hay que tener la claridad. Cuando te prometen un lugar es a causa de que la empresa ha asumido un compromiso psicológico contigo. Por lo que tu capacidad de dominio se ha elevado. Pero, aun así, hay que valorar la oferta, por lo que es necesario repasar la oferta y relacionarlas con tu progreso, tu calidad de vida y la diversidad del trabajo que anhelas hacer.

Aceptar o no una oferta de trabajo, aspectos que debes considerar

Indudablemente, no existe una oferta de trabajo perfecta, por esto tu evaluación debe partir en que pienses en las licencias que quieres obtener.

Transforma tu mentalidad: Cuando asistes a una cita de trabajo, la intención es lograr la oferta. Luego la siguiente etapa radica en calcular esa oferta y después negociar con tu nuevo jefe. Jamás se puede desistir de ser apasionado porque, si te perciben muy crítico o al debatir algo sobre la oferta, estarás remitiendo una señal negativa. Los jefes precisan sentir que eres comprometido.

Se ordenado: El tema del dinero es esencial, no obstante, no es lo único a valorar y a examinar. Así que, es preciso plantear ¿qué valor posee esa oferta para ti?, para lo que debes de pensar:

         Salario: Si bien la cantidad puede resultar suficiente para tus necesidades, debes considerar si tiene relación con el valor de tus destrezas y conocimientos. Para conocer si está en concordancia con el mercado, inspecciona las ofertas semejantes en los portales de empleo y compara con un rango de diferenciación del diez o el quince por ciento.

         Ajuste cultural: Es preciso conocer la empresa y los niveles de rotación que hay. Existen secciones, como consultoría o auditoría donde los niveles de rotación son elevadísimos, pero presumen ser una plataforma para comenzar una carrera profesional.

         Flexibilidad: Numerosas personas establecen como prioridad el salario emocional. Como la disponibilidad de vacaciones, la armonía o la oportunidad de trabajar horas flexibles. Conversar este asunto puede ser dañino. Sin embargo, una cosa es exponer tus intereses y otra cosa es conocer cómo percibe y valora la empresa estos temas.

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          Muestra seguridad y positivismo: Durante un convenio hay que extender el valor de las cosas que estás listo para aceptar y minimizar las cosas que se está solicitando. No se trata de lo que pides, sino de cómo lo pides. Por ello es necesario estar bien preparado, ser educado y constructivo. La clave es mostrarse como una persona con quien se quiere trabajar.

Si no te interesa, di que no: Lo perfecto es que exista algo que proporcionar y recoger en estas contrataciones. Pero si te hayas con un no para todo lo que solicitas, eso indica inflexibilidad, y quizá no sea esa la gestión con la que deseas convivir. Si no te ves trabajando allí, muestra un par de razones por las que piensas que no es para ti. Pero siempre dejando una puerta abierta en el futuro.