Aprende a decir NO a un cliente, para lograr decir SÍ a muchos otros

Aprende a decir NO a un cliente
Aprende a decir NO a un cliente

Aprende a decir NO a un cliente, para lograr decir SÍ a muchos otros. Inevitablemente existen clientes que son muy absorbentes, belicosos, al verlos sabes que serán poco beneficiosos y muy exigentes. Sin embargo y a pesar de todo lo conservas en la cartera, se convierten en ladrones de tiempo y terminan por acaparar toda nuestra atención. Por eso es preciso decir NO a un cliente, para tener tiempo para decir SÍ a otros que podrían resultar más beneficiosos.

Así mismo, y además de todas estas particularidades se agregan otras que lejos de optimizar la relación con nuestra empresa la empeoran. Generalmente resulta muy difícil lograr que te escuchen, pero más aún que se dejen sugerir o hagan caso. Si ya han tomado una decisión o un camino, aunque les insinúes la equivocación y que van hacia el abismo no hacen caso.

Aprende a decir NO a este tipo de clientes

Empeora cuando realizan peticiones que por lo general nos obligan a renovar el trabajo una y otra vez. Y todo esto va acompañado de un tira y afloja presupuestario donde la abundancia de horas empleadas o el convenio de los precios juegan siempre en contra de la empresa.

Y como cereza del pastel, muchas veces ni siquiera pagan, o al menos no la totalidad. Siempre surge alguna excusa de los 5 millones de peticiones, resulta que hay una, significativísima para ellos que no se ha ejecutado y les vale de autojustificación para no costear el trabajo realizado.

Aprende a decir NO a un cliente, para lograr decir SÍ a muchos otros
Aprende a decir NO a un cliente, para lograr decir SÍ a muchos otros

No solo se trata de que perdemos dinero, sino de que este tipo de clientes asumen un coste de oportunidad tan alto, que son un desgaste tan significativo, ante otros clientes que nos reportan más beneficio en diversas ocasiones se quedarán frustrados.

Finalmente, lo único que queremos es quitárnoslos de encima, por lo que generalmente se accede a lo que nos solicita con tal de concluir de una vez. Ellos lo saben, ya que no es la primera vez que lo hacen. Es su baza para lograr todo lo que aspiran a un costo irrisorio. Y para cerrar la faena, en cuantiosas ocasiones ni siquiera son clientes fieles.

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