El arte de la guerra es un conocido escrito de Sun Tzu. Donde se manifiesta y reflexiona acerca de las distintas formas de obtener el triunfo en circunstancias difíciles gracias a la estrategia. Es cierto que las tácticas planteadas en este libro están pensadas y orientadas en el ámbito guerrero. Sin embargo, sus enseñanzas consiguen aplicarse a otros variados aspectos, como el contexto empresarial y la competición dentro del mercado.
Las sabidurías de Sun Tzu llevan impartiéndose desde hace muchos años en el ejército o la empresa. Lo más transcendental para tener presente siempre: es que la información es poder.
Seguramente muchas personas que se hallan al mando han leído a Sun Tzu, que escribió El arte de la guerra
En un apartado él expresa “si conoces a tu contrario y te conoces a ti mismo; no convendría temer el resultado de mil batallas. Si te conoces a ti mismo, pero no a tu contrario, por cada cruzada que ganes sobrellevarás una derrota”. Y sigue indicando “si no conoces ni al contrario ni a ti mismo; perderás todas las batallas”. Cualquiera que esté al mando, lo ha leído
Las proposiciones del estratega chino revelan una capacidad de síntesis, que numerosas de ellas han pasado ya a la historia militar. Principalmente posteriormente a su descubrimiento en Occidente durante el siglo XVIII. Finalmente, la enseñanza más significativa que provee el libro tiene mucho que ver con la era actual: la de la información.
La excelente forma de obtener esa información es contratando espías. Y es absurdo contratar espías honrados si no estás preparado para pagarles favorablemente. Posiblemente sea un tanto radical comprar a un compañero para que nos ayude en nuestra empresa. Pero lo que sí alcanzamos hacer es establecer alianzas de beneficio, o pretender buscar utilidades comunes que favorezcan a ambos.
Realmente, es más simple que eso: solamente siendo agradables, conversando con los demás y conquistando su confianza logramos obtener tanto esa información que puede ser importante en cualquier instante, como un honrado socio que combatirá a nuestro lado cuando explote la guerra. Pese a este lenguaje guerrero, no hay que especular todas estas relaciones como una farsante exposición de interés, sino como la creación natural de puntos de apoyo y confianza.
No obstante, a la popularidad que Sun Tzu posee el título de obstinado y manipulador estratega debido a su defensa de la astucia. Este escritor no vacila un segundo en proteger que el papel decisivo de un líder no es el propio beneficio, sino ayudar a que todo su equipo consiga sus propósitos. Tus socios son tus amigos, y viceversa.
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