La gran lucha de precios online y las tiendas físicas

La gran lucha entre las tiendas físicas y las online
La gran lucha entre las tiendas físicas y las online

En la actualidad existe la gran lucha de precios online y las tiendas físicas. Funciona de esta manera. Antes de adquirir un producto en una tienda física, se revisa el precio del producto en la web.

Esta es una regla de oro que están iniciando numerosos consumidores, y que de alguna manera está afectando a las tiendas físicas. Primero tenemos la lucha de precios online entre las grandes tiendas virtuales que hay. Y segundo la habilidad del showrooming de los compradores.

La gran lucha de precios entre las grandes tiendas online conlleva a que si al menos uno de ellos reduce el precio de un producto, todos los restantes reaccionan prontamente. Esto se convierte en un bailoteo de costos que es complejo de gestionar para una tienda física.

Es complicado inclusive para grandes del retail que venden además de manera online. Y se observa que generalmente el precio de un producto en línea de la tienda no es el mismo precio del propio producto en la web.

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La gran lucha de precios también lleva a comparar precios con la competencia online

Es fundamental poseer una herramienta que nos ayude a mantenernos informados de los precios de nuestra competencia. Esto además permitirá crear alarmas si modifican determinados artículos, etc. Esto admite equiparar ágilmente los precios en caso de que bajen.

Simultáneamente hallamos compradores que pretenden percibir los productos de primera mano. Van se los prueban, hacen el empalme con el mismo. Sin embargo, antes de adquirirlo lo investigan por la web para ver si lo localizan más económico antes de tomar su decisión de compra.

Y dependerá además del margen, la diferencia entre las dos ofertas y no hay un aspecto de compra impetuosa que lleve a anhelar el producto prontamente, es muy factible que se termine adquiriendo de manera online. Todo esto presume una dificultad para la tienda física sea competitiva.

Lo primordial es ajustar los precios, modificar las tácticas en la venta. Entre las ventajas se encuentras que en las tiendas físicas se puede devolver el producto, efectuar cambios, etc. Y asimismo, brindar una excelente atención al cliente, esa interacción en persona logra que su experiencia de compra sea superior de lo que consiguen lograr online.

El vendedor debe transformarse en el consejero para el comprador, que le sugiera la mejor elección para ellos. Lamentablemente esto no siempre sucede así. Indudablemente el vendedor pretende sugerir los productos que les brindan mayor margen comercial, a pesar de que no sea la mejor opción.

Igualmente, el comprador generalmente llega muy enterado a la tienda. Porque ya ha examinado el producto online. Ha cotejado con otras elecciones, y casi ha decidido de realizar la compra. El trabajo de la tienda física es conseguir que lo realice en la propia tienda y no regresar a casa para hacerlo online.