Para que tu empresa tenga un funcionamiento óptimo y alcance altos niveles de rendimiento, debes aprender cómo liderar y mantener motivado a tu equipo de trabajo.
Los negocios que cuentan con un equipo sólido, comprometido con su trabajo, donde cada logro es valorado como resultado de un esfuerzo conjunto, tienen un buen liderazgo y una motivación permanente.
Se dice que un emprendedor debe ser un líder y es cierto, el emprendedor introvertido o extrovertido, necesita delegar estratégicamente para conducir a su equipo de trabajo y mantenerlo motivado.
De esta manera, juntos, podrán adquirir habilidades que les permitan enfrentar los nuevos retos que se presentan cuando la empresa va adquiriendo un mayor tamaño.
Si por el contrario, el equipo pierde interés por el negocio, reflejándose en su rendimiento diario, es imposible que un negocio se desarrolle con éxito.
Por esto, James McGrath, experto en gestión empresarial, autor de El pequeño libro de las grandes preguntas del management, ofrece siete claves para darle vuelta a esta situación.
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No controles en exceso a tu equipo
Acuerda con cada empleado los límites de su responsabilidad y luego sal de su camino. A medida que vaya aprendiendo, amplía esos límites.
Si se equivoca de forma repetida, conversa con él o ellos para identificar dónde estar el error y así puedan encontrar soluciones.
Muéstrales cómo su trabajo contribuye a la producción global del equipo
Ten en cuenta que la gente está motivada por un trabajo interesante que considera significativo, por eso es crucial que destaques la importancia de los roles dentro de la organización.
No asignes todo el trabajo desagradable a una sola persona
En cualquier equipo siempre hay una serie de tareas que resultan tediosas o aburridas; sin embargo, no es conveniente para nada que asignes a una persona para que realice todo el trabajo solo. Tampoco les des a tus empleados una sola función por mucho tiempo. ¡Ayúdalos a salir de su zona de confort!
Establece metas claras
Asegúrate de que tu equipo tenga claro los objetivos y metas que estén en plena consonancia con el de la empresa.
Cuando hables en público, no domines las reuniones
Deja que el personal se ocupe de la mayor parte de las intervenciones. Así se generarán nuevas ideas y puntos de vista. Ojo, ni tú ni nadie es dueño de la verdad; así que no es conveniente ser herméticos con una idea en particular.
Predica con el ejemplo
Demuestra que prefieres llegar al consenso sobre una idea o decisión a tomar, básate en una decisión a mano alzada. ¡Sé demócrata!, si el caso lo amerita.
Anima y exhorta
Motiva a los de tu equipo a que asistan a las reuniones; con el fin de que ellos mismos evalúen su trabajo.
Te aseguro que con estas recomendaciones, no solo estarás mejorando la gestión de dirección de tu equipo de trabajo; sino también lograrás que tus empleados estén motivados de forma permanente.
En el caso de que las cosas no funcionen como te lo esperas, toca preguntarte; ¿cuál de tus acciones estaría provocando un mal rendimiento de tu equipo? Piénsalo y analiza…
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