The Circular Lab es un plan pionero en Europa que une todas las procedimientos y recursos para promover la creación en el ámbito de los envases y su posterior reciclado. Todo esto envuelto con la concepción de Economía Circular.
The Circular Lab participa en todas las etapas del ciclo de vida de los envases. Desde su idea, mediante del ecodiseño, hasta su reinserción al ciclo de consumo a través de nuevos productos.
Este es el único foco de invención en el mundo especialista en este ámbito. En este laboratorio de invención del envase se investigará, creerá, experimentará y empleará en un contexto real las mejores prácticas.
Todo esto estableciendo una gran colaboración de innovación abierta entre compañías, administraciones públicas y por supuesto los ciudadanos.
En este contexto será esencial la responsabilidad del ciudadano al momento de reciclar y la aplicación de las superiores tecnologías en la gestión de los residuos. Que se desplegarán gracias a la presteza del propio centro, e igualmente a través del ecosistema emprendedor.
El 17 de mayo es la inauguración The Circular Lab
Un laboratorio de economía circular precursor en Europa
Se oirá hablar acerca de Economía Circular desde el momento de la inauguración. Corroída por el abuso, la palabra sostenibilidad abre paso a un novedoso concepto. No es solo modificar el modelo económico actual, que disipa recursos y altera el entorno natural.
Es principalmente proporcionar la manifestación de una nueva cultura. En la que la Naturaleza y el medio ambiente se ubiquen el centro de los procesos fructíferos.
Ya no se aguanta la costumbre actual adoptada: preciso, utilizo, tiro, impurifico, retorno a comprar, utilizar y tirar. Un circulo vicioso y desgastante.
La economía circular, fundamentalmente, representa remedar a la naturaleza, manifiesta Víctor Viñuales, director de Ecodes. En ella nada sobra, no hay basura, todo se reaprovecha.
Mi opinión es que el gran reto es solucionar lo más pronto posible la insostenibilidad de los plásticos que atiborran los océanos, dañando así la alimentación de los peces y por ende nuestra propia digestión.
El futuro del reciclaje está en nuestras manos: en la participación ciudadana, asegura el naturalista y divulgador José Luis Gallego. Poseemos la tecnología, el discernimiento y la práctica suficiente para que los residuos dejen de ser basura.
Solo fallamos al ponerlo en práctica. Se requiere aumentar la colaboración y reducir el margen de error.
Del mismo modo, la nueva cultura de la economía circular establece un vínculo entre sostenibilidad y economía, revelan desde Ecoembes. Esta es una empresa que gestiona la recuperación y el reciclaje de la mayor parte de los envases en España.
Asimismo, se está intentando transformar hacia un sistema de producción. Que se vale de los residuos, para convertirlos en recursos. Anima a la prevención y apuesta por la innovación en el momento de estimular el tejido industrial y el empleo verde.
Se fomenta así, un progreso sostenible a largo plazo, en el que se invierte en productos y servicios que también son verdes.
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