Siempre que realizamos un artículo buscamos la manera de darles ideas a las personas de cómo mejorar. Ya sea para que sus clientes vayan en crecimiento o hasta como tratarla para mantenerla. Pero en esta oportunidad vamos a nombrarles algunos tipos de clientes que no querrás que lo sean. O por ser mala paga o por ser intransigentes, etc.
La idea es que los analices de acuerdo a ciertas características y luego determinar si entran en estos rangos o no
El monopolizador: Este personaje es el que usualmente necesita la total atención, con llamadas telefónicas, con pedidos, etc. Es un peligro el caer en un vínculo comercial con alguna compañía para el cual se supondría el 1% de los gastos. No obstante, representa más del 60% de cada ingreso dado debido a que siempre se estará en posición de vulnerabilidad.
El egipcio: Este se ha definido como esa persona el cual permite caer. Esto en el transcurso de alguna conversación al conseguir que le den a regalos, obsequios, etc. Lo mejor que se puede hacer es evitarlo ya que no se trata de un cliente fiel. Ya que en el momento que alguien más lo soborne con más dinero o mejores obsequios, se marchará.
El intransigente: Él que todo el tiempo tiene la razón y siempre está colocando peros hasta el más pequeño detalle. Es sencillo detectarlo en la primera entrevista, por su manera de actuar. Quizás sea una persona que cuenta con dinero pero hacen que el trabajo no sea atractivo para el empleado o hasta unos mismo. Ya que lidiar con este tipo de personas que siempre tienen la razón es difícil.
Quizás el siguiente cliente que no querrás tener como “cliente” sea un poco difícil de detectar al principio. Ya que descubrirás su defecto luego de haber realizado negociación con él
El mala paga: Hoy en día existen muchas compañías que logran entrar en este aspecto. Lo más relevante es poder informarse antes de esas empresas profesionales en hacer un análisis de morosidad.
Clientes pirata: Es ese el cual realmente está muy cerca al producto o servicio y lo que pretende es contratarlos para poder copiar el proceso u oferta que vosotros estáis proponiendo. Es complicado de detectarlo debido a que usualmente hacen un pedido inicial y cuando ya han logrado copiar el método, desaparecen, dejando el daño allí.
El indefinido: No plantea los plazos, no precisa los costos ni tampoco concreta el contenido. En este caso, se debe atar con algún contrato en el cual se recalque todas esas cuestiones o que están abocado a cargar más que un simple estrés de cabeza.
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