Indudablemente andamos navegando en las inmensas aguas del mundo digital. Solo una minúscula parte de la población del planeta tiene poca interacción con las plataformas virtuales. Esto ha hecho que gran parte de las actividades cotidianas de la sociedad, se hayan trasladado a este medio, incluyendo las de tinte comercial. Por esa razón, la mayoría de los presupuestos publicitarios van hacia el marketing digital, confirmado por un estudio desarrollado por IAB Spain, donde para el año 2022 el 51% del presupuesto de marketing se destinó para los medios Online.
Sin embargo, esas cifras no deberían engañarnos, el marketing tradicional sigue teniendo igual o mayor importancia que el 2.0. Es momento que pisemos tierra y veamos que el éxito de cualquier estrategia publicitaria radica en la creatividad y diversidad, solo allí podemos marcar la diferencias y conseguir el preciado éxito.
Una de esas herramientas alternativas nos las puede ofrecer una imprenta digital, nos referimos a un catálogo de productos impresos. Se trata una forma tangible y creativa para mostrar los artículos o servicios que ofrecemos; y a través de un diseño elegante y sofisticado, los potenciales clientes pueden explorar, tocar el papel, disfrutar de su textura y la intensidad de sus colores, logrando una conexión física con lo que queremos promocionar. Cosa que, evidentemente el marketing digital no puede lograr (al menos de momento).
Así es, los catálogos impresos aún tienen un lugar en el mundo de los negocios. No solo para las librerías y editoriales, sino también para tiendas de moda, proveedores de servicios, fabricantes y más. Las posibilidades son amplias y los beneficios, contundentes.
En este artículo, vamos a explorar los beneficios de catálogos impresos en los negocios, e identificaremos qué tipos de empresas se gozan más de ellos.
¿Qué es un catálogo impreso y por qué es relevante?
Cuando hablamos de un catálogo impreso, no referimos a una publicación tangible que presenta en detalle los productos o servicios que una empresa ofrece. Pero no se trata de una simple lista de artículos, sino que va mucho más allá; es una herramienta de marketing potente, diseñada para captar la atención de los clientes y generar interés. En cada una de sus páginas, se puede mostrar imágenes atractivas, descripciones persuasivas y otra información útil que haga que los productos o servicios se destaquen.
Si bien es cierto, en esta era digital, algunos podrían considerar que no merece la pena imprimir un catálogo de productos, principalmente porque se puede hacer en digital, a través de una tienda online, y por las redes sociales las redes sociales. Sin embargo, todavía existe una buena parte de la población que aún valoran la experiencia física de examinar un catálogo.
Este formato ofrece un descanso de las pantallas y permite una forma de exploración que puede ser más lenta, detallada y reflexiva. Además, una revista puede tener una vida útil más larga que un anuncio digital, pues puede ser revisado en repetidas ocasiones y compartirse con otros, incrementando su alcance y duración.
Cuáles son los beneficios de catálogos impresos en los negocios
Si todavía no estáis totalmente convencido, es comprensible, los anuncios digitales han arropado casi todo, pero aún hay espacio para los elementos tradicionales y físicos. En su naturaleza tangible, trae consigo una gran cantidad de ventajas que permitirán fortalecer y diversificar las estrategias publicitarias de cualquier organización, pero sin duda algunas la sacarán mucho más provecho que otras (cosa que veremos más adelante).
Lo que sí es cierto es que, sin importar qué tan efectivo sea el marketing digital, no podemos subestimar el poder y la relevancia de estas herramientas en esta era. Para demostrártelo, hemos preparado una serie de beneficios de los catálogos impresos en los negocios:
1. Conexión física
Un catálogo impreso proporciona una conexión física entre la empresa y el cliente. Este tipo de interacción puede generar una relación más profunda y personal con la marca, ya que se siente, se toca y se puede interactuar con ella de una manera que no se puede lograr con los medios digitales.
2. Mayor retención
Por otro lado, ayudan a aumentar la retención de la información. Según un estudio de Canada Post, el cerebro procesa la información impresa un 20% más fácilmente que la digital. Lo que significa que los clientes son más propensos a recordar nuestra marca y productos cuando los ven en formato físico.
3. Experiencia sin distracciones
Además, ofrece una experiencia de compra sin distracciones. A diferencia de las compras en línea, donde los anuncios, las notificaciones y otras pestañas pueden desviar la atención del cliente, los elementos impresos tienen mayor posibilidad a captar la atención y centrarse por completo en los productos del catálogo.
5. Versatilidad
Crear catalogo de productos nos permite tener una especie de “vitrina” portátil, que pueden ser enviados por correo directamente a los clientes, o se pueden dejar en lugares estratégicos para que los recojan a cualquiera que pueda interesarle.
¿Qué negocios necesitan un catálogo impreso?
Como mencionamos en párrafos anteriores, muchas empresas pueden beneficiarse de tener un catálogo impreso, pero ciertos tipos de negocios pueden sacarle mucho más provecho. Este tipo de herramientas suelen ser más útiles para organizaciones que ofrecen una variedad de productos, particularmente si necesitan ser explicados o visualizados para ser apreciados correctamente.
Veamos algunos de los negocios para los que podría ser especialmente necesario imprimir catálogo de productos:
- Tiendas de ropa y accesorios: estos negocios pueden mostrar sus productos de una manera atractiva, proporcionando a los clientes una visión detallada de su gama de productos.
- Empresas de muebles: para estas organizaciones les es vital mostrar sus muebles en un contexto, lo que ayuda a los clientes a visualizar cómo podrían verse en sus propios hogares.
- Tiendas de productos gourmet: es una forma de transmitir la calidad y exclusividad de sus productos, a través de fotografías de alta calidad y descripciones detalladas.
- Compañías de joyería: los catálogos permiten a estas empresas mostrar con detalle la calidad y la artesanía de sus joyas.
- Proveedores industriales: son muy útiles también para los proveedores industriales, ya que pueden proporcionar especificaciones técnicas detalladas y otra información relevante sobre sus productos.
Es más que evidente el poder que aún reside en los catálogos impresos, incluso en esta era digital. Estas herramientas táctiles, duraderas y versátiles pueden servir para enriquecer tus estrategias de marketing, proporcionando una conexión física con tus clientes y permitiéndoles interactuar con tu marca de una manera personal y significativa.
