Debemos aprender a delegar cuando pensamos emprender algún proyecto. Y es que iniciar un proyecto o regir una empresa es un sueño para todo emprendedor. Todo lo que, por mucho tiempo, inclusive años, hemos ideado en nuestra cabeza, sobre cómo crear tal o cual cosa, y ahora tenemos la oportunidad de hacerlo. Pretendemos tener todo contralado, ocuparnos personalmente de hasta el más mínimo detalle para que todo esté como nosotros anhelamos.
Este es un error que se paga muy caro. Por eso si vas a emprender, antes debes aprender a delegar
Probablemente no lo sepas, pero en estos asuntos lo perfecto es conversar con alguna persona que previamente haya iniciado su negocio; o iniciado una empresa para que nos proporcione una mínima orientación sobre de lo que se trata y como estar preparados.
Es importante entender que a pesar de lo que queramos no vamos a lograr estar encima de todo. Y en lugar de tener controlados todos los detalles; nos va a pasar por encima y no lograremos controlar nada. Y lo malo es que las personas que trabaja con nosotros, los que nos colaboran para encaminar la empresa, tampoco estarán satisfechos; ya que, si precisan hablar con nosotros para que tomemos una decisión, ni siquiera conseguimos atenderlos.
Generalmente, vamos siempre tarde. No respondemos y finalmente cada uno termina haciendo lo que cree apropiado, para nosotros o lo que resulte más cómodo para ellos. Y la consecuencia es una enorme desorganización. En ocasiones el principal inconveniente es que no sabemos rodearnos del equipo apropiado.
Igualmente ocurre en el momento de tomar decisiones en la empresa, productos, vendedores, publicidad o cualquier otra área de la empresa. Si sabemos seleccionar a tres o cuatro colaboradores; definimos con ellos en distintas reuniones como aspiramos trabajar y llevar la empresa, la labor será más de supervisión y coordinación, que ya será dura como para llevarla a cabo.
Este es el asunto más complejo. Saber elegir bien en que equipo podemos delegar funciones para que nos colaboren en la ejecución de acciones. Si son parte de nuestro equipo, debemos proporcionarle la importancia en la empresa que merecen. Si son colaboradores, no podemos fracasar, tenemos que escoger aquellos profesionales contrastados que anteriormente ya han estado en otros lanzamientos y los han dirigido con éxito.
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