Vender una idea o un producto, puede ser la tarea más difícil que exista. Algunas personas nacieron con el don de vender y se les da de manera casi natural. Otras aunque han intentado vender cosas y (algunas les salen bien) la mayoría no. Porque no logra convencer al cliente de que le compre. A continuación les presentamos las claves para que el cliente no se les escape y le compre, no lo que quiere, si no lo que usted le hará creer que él necesita.
Una de las claves es saberse su nombre y su historia
Sí, como lo leen. Al cliente le encanta que usted recuerde todo lo que hablaron la primera vez que intento enamorarlo para que le comprara. Usted lo debe llamar por su nombre. Convertir esa media hora en algo mucho más agradable, el cliente sentirá confianza por usted. Y aunque no lo crea, mientras le cuenta la historia de su mamá, podría terminar la mamá como una futura clienta.
Entender qué es lo que desea
Para poder vender un producto, es necesario entender que es lo que realmente desea el cliente. Qué es lo que espera del producto, por qué lo necesita o por qué lo quiere. Esto se logra indagando y haciéndole preguntas que den justo en el clavo. Es casi imposible pretender vender algo si no se sabe que espera el beneficiado del producto. Porque si este llegara a cambiar de opinión momentáneamente, le podrías recordar la razón, por la que quería desde un principio comprar el producto.
Agradece la venta
No se trata de dar lastima ni mucho menos. Pero si hay algo que nos gusta a los seres humanos es saber que hacemos algo por los demás. Sí, la persona necesita el producto, peor tú necesitas la venta. Ambos funcionan como un engranaje. Al momento de la negociación, puedes comentar lo importante que es para ti vender ese producto. No tiene que ser necesariamente por dinero. Si no que vender producto, puede significar que tu empresa continua a flote o un logro a nivel personal. Esto hará que el cliente lo sienta más cercano a él.
Las oportunidades en el mundo de las compras y ventas, pueden ser muy breves. Hay que aprovecharlas y no dejar escapar a ningún cliente. Pero si él te ve desinteresado o que quieres vender por vender, lamentablemente dudará en comprar el producto. A menos que lo necesite urgentemente. Pero la idea no es que esto suceda, sino que las personas quieran seguirte comprando a ti. Pon en práctica estas pequeñas claves y haz grandes diferencias.
