Como realizar la gestión de una crisis correctamente

Cualquier empresa, independientemente de su tamaño, debe estar preparada para la crisis. Expertos en relaciones públicas  son conscientes de todos los peligros y riesgos potenciales que la empresa puede enfrentar. La aparición de la crisis no se puede atribuir a una causa específica, pueden ser un número de factores relacionados con las actividades de la empresa y / o las circunstancias externas.

La gestión de crisis en un componente integral en el campo de las relaciones públicas, que en la práctica se deben utilizar con el mismo y exhaustivo cuidado posible. Los resultados de una gestión de crisis competente y la operación de relaciones públicas pueden literalmente salvar vidas, las finanzas y a la empresa de la ruina. Cualquier empresa que no está preparada para la crisis, está constantemente en riesgo.

La formación es necesaria para cualquier situación de crisis, por lo que el plan anti-crisis debe ser parte de la gestión de las comunicaciones de la empresa y debe ser utilizado como una guía clara y lógica para minimizar posibles pérdidas que puedan originarse por la empresa.

El plan anticrisis es necesario para determinar lo crítico de la situación de la empresa y los peligros que puede enfrentar, y la probabilidad de que esto suceda. En otras palabras, es necesario hacer una “lista del nivel de crisis” que pudiera suceder, y para evaluar su credibilidad en la escala:

0-imposible
1-improbable
2 casi posible
3 posible
4 probable: quizás algunos competidores la han enfrentado
5 alta probabilidad: signos inquietantes que son ya evidentes

La magnitud de los daños que podrían causar una crisis deberían tener este aspecto

  1. No hay daños, sin consecuencias graves
  2.  Sin daños: se puede gestionar sin demasiada dificultad
  3.  Daños pequeños: ligera posibilidad de que la empresa pueda estar implicada
  4.  Daño significativo, pero que no terminan siendo un problema importante
  5. Gran daño, que debiera ser discutido ampliamente en la empresa
  6.  El efecto destructivo, que puede devastar una empresa.

Así, la identificación de los posibles riesgos y daños que puedan ser causados a la empresa y para garantizar la preparación y la planificación de contingencias, una empresa puede reducir la pérdida de la realidad o detener los procesos destructivos.

El plan anti-crisis debe ser cuidadosamente diseñado y organizado sistemáticamente, punto por punto, y debe hablar en detalle sobre todos (accionistas, el público, los medios de comunicación) y todos (información preliminar, las disposiciones clave, el centro de control, equipos, suministros, etc.).

Debe describir en detalle las acciones que deben tomarse siempre que sea posible proporcionar enlaces a todos sus contactos importantes. Todo esto debe ser pensado y ejecutado antes de la crisis, y las acciones de todo el personal deben ser ensayadas.