Contra riesgos, ¿Estás seguro? I parte

Contra riesgos
Contra riesgos, asegúrate II parte

Contra riesgos. Si crees que los seguros implican un gasto superfluo, piénsalo dos veces. Continuamente escuchamos casos de amistades o conocidos que salvaron un problema gracias a un seguro.

Contra riesgos ¿Qué es un seguro?

Se puede definir como un mecanismo a través del cual un asegurado paga una cuota para formar un fondo con otras personas que comparten un mismo riesgo. Los tres tipos más importantes son de gastos médicos mayores, mediante el cual la póliza, dependiendo del tipo que se haya escogido, puede cubrir desde una visita médica hasta una intervención quirúrgica, incluso en el extranjero; seguro de vida, con el que, según las combinaciones que se hagan con el agente, tus seres queridos quedan protegidos en caso de que algo te llegara a suceder; y finalmente el seguro que protege tus bienes, como puede ser la casa y automóvil.

Los riesgos. La razón principal por la que una persona adquiere un seguro es para estar prevenida contra riesgos. Los principales son de automóviles (robo-accidente); de casa, por incendios o robo; de vida, por accidentes o enfermedad, y de salud.

Existen otros tipos de seguro, como el clásico seguro de vida que cubre el riesgo de muerte, de invalidez o incapacidad. Pero quizá si eres joven, no te interese este tipo de cobertura.

Contra riesgos
Contra riesgos, es una inversión

Con los seguros de vida puedes hacer combinaciones de inversión y de seguros educacionales. Si tienes una bebita de dos años, puedes adquirir un seguro y de alguna manera garantizarle que, si a ti te llega a pasar algo en el futuro, ella queda protegida con una especie de fideicomiso que le da los fondos necesarios para que puede continuar sus estudios, depende de lo que establezcas.

Estos seguros le dan la aportación para que pueda subsistir, pague renta, alimentos, visitas al doctor y medicinas, entre otros.