Empoderar a los niños y adolescentes en educación financiera II parte

Empoderar a los niños en el ahorro y planificación
Empoderar a los niños en el ahorro y planificación

Este proceso de empoderar a los niños y adolescentes en temas financieros requiere de constancia, hábitos, y por sobre todo precisa del ejemplo que los adultos les brinden a sus pequeños. Es un camino que asegura un final de tranquilidad económica.

Consejos para empoderar a los niños según la Unicef

Instruirlos en cómo elaborar un presupuesto

Durante las vacaciones, algunos chicos se marchan de campamento o a pasar varias semanas con los abuelos, unos tíos, y ya poseen edad para manipular efectivo. Es un buen momento para demostrarles que confías en ellos.

En esas circunstancia, acércate y proponle elaborar un presupuesto juntos para cada día o semana. De manera que logren aprender a gastar lo que les des con moderación.

Esto no quiere decir que les concedas todo el dinero de las vacaciones. Aunque si lo de sus refrigerios, para intentar ir monitoreando como maneja el dinero.

Que concienticen que ahorrar trae satisfacciones

Si hay algo complicado de hacerle entender a un joven adolescente es aprender a esperar. Debido a que la inmediatez es fundamental para compartir cualquier experiencia en las redes sociales. Presumir gastos o compras de última tendencia.

Sin embargo, con paciencia en medio, progresaran y aprenderán que el “sacrificio” de almacenar monedas o billetes hoy, será la base de su gozo cuando mañana alcance utilizar sus ahorros en algo que sea significativo para sí mismo.

La inversión multiplica el dinero

Muy pocos padres enseñan a sus hijos a invertir, a menos que estén estrechamente vinculados con temas financieros. Adquirir acciones, apostar dinero a plazo fijo y capitales que se valorizan mejor con el tiempo. Son buenos modelos que les indican cómo se logra multiplicar el dinero, aunque no vean los billetes crecer ante sus ojos como las plantas.

Este hábito requiere de tiempo para implantarse, pero una vez se comienzan a ver los frutos, la historia cambia.

¡Visita la parte uno!