Dentro de la práctica de los Métodos de Kayak, existen unos que son aplicables en la organización de equipos de trabajo. Generalmente, oímos la frase “todos estamos en el mismo barco”, sin embargo, pocas veces lo apreciamos como algo serio.
Una compañía en la que sus empleados proceden sin enlace, sin coordinación y en la que la comunicación es defectuosa, se transforma en una barca que no logra progresar recto.
Existen unos métodos de Kayak, adaptables a nuestra cotidianidad en las compañías
Ante la falta de coordinación, el esfuerzo no vale: Los esfuerzos particulares son nulos ante la desconexión grupal. Los tropiezos de remos suceden muy continuamente en el ámbito laboral. Presumen un desgaste de ritmo y un problema que debemos remediar velozmente.
Si un empleado apuesta con toda su energía en efectuar un trabajo; pero los demás no intervienen en las fuerzas de progreso con una buena unión, sus esfuerzos no valdrán de nada y se hundirá en la desmotivación.
La comunicación vertical debe ser eficaz: Si en un barco de 4 personas, la última no presta atención a las ordenes de coordinación, acabará perturbando al equipo. Asimismo, el ritmo debe ser claro por el primer remero, en este caso, el líder.
Si los que van atrás no comunican ese ritmo correctamente, el último queda completamente desacompasado, sobrecargando las fuerzas de avance.
Combatir contra vientos y mareas: Cuando afrontamos un mar poco amistoso, la comunicación se entorpece y la coordinación se resiente. En ese instante es necesaria la observación y el juicio de todos. A veces hay que solicitar ayuda y hay que saber hacerlo antes de estar descomunalmente lejos de la orilla.
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Cuenta más el trabajo grupal, que la fuerza ruda: No vale apostar todo nuestro tesón en cada batida si todo el equipo no contribuye. Es más meritoria una navegación coordinada que fuerzas distribuidas de forma disímil.
Los problemas destrozan la coordinación, manchan la comunicación y perturban al equipo. Todo debe componerse en el instante más apropiado para todos.
El liderazgo: Es indispensable un liderazgo claro y un equipo de trabajo sensato de su rol. Unos se ocupan del progreso y otros de corregir la dirección. Cuando esto no está claro se acaba navegando en Zig Zag.
En los métodos del Kayak aplicados en una empresa, la coordinación y comunicación son dos términos que deben ser entendidos como uno solo. No deben existir de forma independiente en una empresa y son los primordiales motores del éxito y de la alineación de buenos equipos de trabajo.
