La mayoría de personas tiene un concepto errado sobre las startup; pues las ubican como aquellas pyme que se desarrollan en el mercado de las TIC’s sin embargo esto no es del todo cierto.
La startup podría definirse como aquellas empresas emergentes cuya relación laboral depende del mercado tecnológico en mayor parte; cuya ambición podría ser mucho más global. Igualmente, tienden a centrarse más en un producto en específico que en un servicio. Totalmente opuesto a las pymes.
Bases de las startup
La base de este tipo de empresas es la innovación sin importar en la rama en la que se desenvuelva; pudiendo aplicarse por ejemplo en algún proceso productivo o modelo de negocio, pero siempre se diferenciará por ésta característica.
La mayoría de las startup que han sido punto de referencia son aquellas que se han desarrollado en el campo de la biotecnología; aunque también las se han dedicado a la exploración de nuevos materiales; por ello es bastante erróneo que las startup son las que se dedican a las redes sociales y nada más.
Generadores de empleo
A diferencia de las pyme donde el empleo y la contratación de personal se genera a nivel local; en las startup ocurre lo opuesto por completo; pues una de las ventajas de estos modelos de empresa es que gran parte del trabajo se puede realizar desde cualquier lugar del mundo; por ejemplo, la sede de una startup puede estar en Madrid pero parte de su equipo de desarrollo en Singapur.
Una de las características más relevantes de las startups es su capacidad para crear empleo, muy por encima de las pyme. Se calcula que por cada empleo directo que se genera en una startup se están creando cinco adicionales.
Riesgos que enfrentan
La mayoría de las startups están condicionadas por los riesgos financieros que asumen, pues se basan en ese concepto de ir por todo o nada; lo que por supuesto podría comprometer su futuro. Por lo tanto; en la mayoría de los casos pierden dinero en el inicio, destacando que si logran mantenerse podrían ser sumamente exitosas.
En este plano se podría decir que las pyme buscan ganar dinero desde sus inicios mientras que las startups lo hacen es a largo plazo pues sus objetivos principales son la masificación de ventas y la escalabilidad.
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