Burnout laboral esta representado por un debilidad mental y física que gradualmente va cobrando fuerza en el individuo; esa falta de absoluta de motivación por las asignaciones que le corresponden; Comienza a notarse a través de los cambios en el comportamiento de que quienes lo padecen.
El cambio de actitud, generalmente relacionado con malos modales o trato desagradable hacia los demás; suele ser un indicativo en los casos de Burnout. Este fenómeno cada vez más presentes en los trabajadores, lo que trae como consecuencia improductividad y uso irracional de recursos. En los empleados puede traer aislamientos, desmotivación, frustración, poca concentración, licencias médicas prolongadas, abandono del trabajo, entre otras.
Cuando una persona padece de Burnout, generalmente presenta palpitaciones, taquicardia, aumento de la presión arterial, dolores de cabeza, dificultades digestivas, dificultades en el sueño, conducta violenta, impaciencia, hostilidad.
Síndrome de Burnout, como abordarlo
El tratamiento se establece en virtud de las molestias concretas del paciente y su intensidad. Adaptándose individualmente, según sea el caso. Iniciar pronto un tratamiento para este síndrome favorece el efecto sobre su evolución. Cuanto antes se reconozca y se acepte que el paciente necesita ayuda, mejores serán los resultados. Tras este paso fundamental el trabajador debe tratar de liberarse de cargas y evitar en gran medida los factores que reconoce le originan el estrés.
Es importante que las personas atesoren tiempo y espacio para realizar las cosas que disfrutan, sus aficiones, paseos por la naturaleza, practicar algún deporte. Mantener contacto con amigos y familiares, esto favorece la autoestima. Evitar el perfeccionismo, aprender en ocasiones hacerse la vista gorda en algunas situaciones que no este en sus manos resolver. Lo mismo aplica en las expectativas irrealistas que generan en su puesto de trabajo.
Para el tratamiento de Burnout no se medica al paciente. En ocasiones se ha prescrito somníferos, con el fin de garantizar la reducción de un síntoma en el paciente, que en este caso sería el trastorno del sueño, sin embargo, esto no aplica para todos. Solo los que presentan esta dificultad.
Según estudios, las profesiones más afectadas con este trastorno son las del ámbito médico y educativo, ya que están en constante interacción con pacientes y alumnos, y además con compañeros, jefes, creando así una fuente de vulnerabilidad al estrés.