Mal trato hacia los clientes es el camino más rápido a la ruina de tu empresa

Cuídate del mal trato a los clientes
Cuídate del mal trato a los clientes

Siempre debemos cuidarnos de no tener un mal trato con los clientes. Existe un dicho que por años hemos escuchado “El cliente siempre tiene la razón”. Esto no es del todo cierto. Pero sí el hecho de que el cliente siempre tiene derecho a ser oído y atendido adecuadamente. Si en tu empresa se brinda un mal trato al cliente; este será el camino más rápido a la ruina de tu empresa.

Es importante considerar todo el trabajo que nos cuesta atraer un cliente, el dinero que es invertido en marketing para conseguir que lleguen a nuestra empresa; y rápidamente nos permitimos la pompa de poner muy fácil su salida sin más. A esto debemos agregarle una variable de reputación que desperdicia nuestra empresa. Ya que un cliente insatisfecho lo comunicará a otros.

Es esencial poseer un departamento de eficacia que nos garantice que la atención al cliente que estamos brindando es la más apropiada. No es suficiente con un sistema para acopiar las quejas de los clientes y solucionarlas con más o menos prontitud, pero si no somos competentes para calcular a cuántos clientes están capacitados de retener, cuántos salen complacidos con la respuesta que les hemos prestado, etc. Entonces no conseguiremos mejorar.

Mal trato a los clientes es la ruina de la empresa
Mal trato a los clientes es la ruina de la empresa

¿Por qué perdemos a nuestros clientes? Por el mal trato que en ocasiones reciben

Es una interrogante que por lo general las empresas no saben cómo contestar, o no con la apropiada seguridad. En numerosas ocasiones es a causa de que encontraron un producto de la competencia superior y más económico. Sin embargo, en otras ocasiones se han marchado por aquellos productos que han tenido algún inconveniente y sencillamente no hemos sabido solventar de manera apropiada.

Y esto aparte de que el inconveniente haya sido nuestro o de un partner, la empresa de logística, etc. Finalmente, si nos compran a nosotros o suministramos un servicio como mediadores tenemos que hacernos garantes y brindar como mínimo una conveniente atención al cliente. Si no hacemos esto, le estamos abriendo la puerta para que se marche a la competencia.

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