La mejor manera de preparar la caja de un envío

La mejor manera de preparar la caja de un envío

Los pequeños detalles serán siempre los que marcarán la diferencia y esto aplica perfectamente en todos los aspectos de la vida; especialmente en el mundo empresarial a la hora de realizar algún envío a un cliente.

Aunque no existe el secreto o la fórmula para lograr la perfección, en este sentido se pueden considerar algunas opciones; mismas que permitan causar una buen impresión y que el cliente se sienta satisfecho al recibir su compra.

Envío con personalidad

A la hora de recibir un paquete normalmente se trata de una caja; casi siempre medio vacía, sin ningún relleno y en la mayoría de los casos el producto puede malograrse de tantas vueltas que puede dar allí dentro. Ésta sin duda no es la imagen que ningún emprendedor quiere para su empresa.

No se trata de llegar a los extremos de perfumar los paquetes o enviar una carta de agradecimiento; por el contrario, se busca es darle un toque especial, esa especie de firma personal que hará distinguir una marca del resto.

Al realizar un envío la mayoría busca lograr la satisfacción del cliente al recibirlo; pues siempre se quiere brindar una buena imagen y no fomentar los comentarios negativos. Y esto, aunque pareciera un poco irrelevante en la mayoría de los casos causa una gran molestia.

Pasos a seguir

Lo primero que se debe hacer es conseguir una caja que vaya en proporción con el tamaño de la mercancía; pues no es lo mismo enviar un libro en una caja de su tamaño o en una demasiado grande. De no conseguir el tamaño ideal, al menos el relleno podría mejorar la situación.

Cuando se envíen artículos frágiles es importante asegurarse añadir el embalaje suficiente, pues brinda una sensación de protección. Igualmente, es imprescindible cuidar el orden de la caja, pues la mayoría de las personas se fijan en ello.

La idea es cuidar estos puntos básicos y evitar que en la medida que los pedidos aumenten la calidad del embalaje disminuya. Esta será la primera impresión que el cliente se llevará de la marca a la hora de abrir su caja.