Un líder con inteligencia emocional, jamás dirá estas frases a sus empleados

Un líder con inteligencia emocional, jamás dirá estas frases a sus empleados
Un líder con inteligencia emocional, jamás dirá estas frases a sus empleados


Un líder con inteligencia emocional, jamás dirá estas frases a sus empleados. Después que usted ha hecho el aprendizaje como para dirigir un equipo, se pone a prueba su capacidad de ser empático con los demás, pero al mismo tiempo, ser una persona que es seguida por otros.

Después de un tiempo de aprendizaje ya quiere dar el salto a un puesto directivo dentro de una empresa. Puede que sea en la compañía donde está trabajando o en una nueva oportunidad profesional. Para eso se ha preparado, tiene diplomados, especializaciones o hasta una maestría. Quizá ya recorrió varios países y es una persona que ha estado en contacto con otras culturas. Pero, lo más importante es que haya cultivado inteligencia emocional.

La ansiada oportunidad de ser un líder, puede llegar en cualquier instante. Pero para eso precisa asimismo de habilidades blandas.

En la actualidad las compañías buscan en sus procesos de selección y reclutamiento perfiles que cumplan con los requisitos técnicos de la posición; pero, todavía más notable, que tengan habilidades alineadas a la cultura de la compañía y a la línea de liderazgo propia de la empresa.

Las llamadas habilidades blandas se están convirtiendo en el gran diferenciador para quienes deseen tener una carrera ascendente dentro una organización. Hacen referencia a las aptitudes, rasgos de personalidad y valores del individuo; convirtiéndolas en requisitos difíciles de aprender o de moldear, a diferencia de los conocimientos netamente académicos.

Es ahí donde el líder debe desarrollar la inteligencia emocional. Que no es otra cosa que la mezcla de comunicación y buen trato con sus colegas; pero al mismo tiempo capaz de solucionar las crisis que se presentan cuando los demás con su actitud no dan los resultados. Nunca te dirá estas frases.

Quiero que te empoderes para…: Esta frase expresa una disminución de poder del otro individuo y crea una atmósfera de codependencia. Si el trabajador siente que debe tener su aprobación para hacer algo significativo, entonces puede dudar de actuar de forma autónoma. 

Puedes hacerlo mejor: intenta motivar pero que en realidad no ayuda a la gente a desempeñarse mejor. Cuando un empleado se va a casa y piensa que está actuando de forma inadecuada; o inclusive, se siente estúpido, no servirá para desempeñarse mejor en los proyectos.

Tengo solo un minuto ¿qué necesitas?: Sus trabajadores hacen que su mundo siga girando, entonces saque tiempo y escúchelos. Ciertamente, habrá ocasiones en que una persona se acerque mientras usted va de camino a una junta, entonces no es mentira que solo tiene un minuto. 

En todo caso, existe una mejor forma de darse a entender entonces no intente empequeñecer el sentido de importancia de un subordinado.

Te ves bien en ese traje: En estos días, esta es una frase obvia. Desgraciadamente, permanecemos con muchos pasajes de “Las 50 sombras de Grey” que constituyen un incidente de acoso laboral en el lugar de trabajo. Aunque muchas personas gozan de un cumplido acerca de su aspecto es mejor mantener el foco en el desempeño laboral.

Está bien, no debes preocuparte por eso: Si un empleado comete constantes errores que salen costosos a la empresa; o espontáneamente pide la tarde libre cuando usted más lo requiere, eso representa un problema.

En vez de intentar abreviar el tema, pregúntele cómo se puede solucionar. Esto animará a otros a pensar las cosas y considerar las consecuencias y las soluciones. Si realmente está bien, entonces no necesita agregar la parte de que “no es necesario preocuparse por ello”.

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