Aunque pueda parecer mentira, el término franquicia ya se usaba en la Edad Media para hacer referencia a las autorizaciones o privilegios que los soberanos otorgaban a favor de algún súbdito en relación a determinadas actividades comerciales; o también de pesca y explotación de recursos forestales.
El origen de la palabra franquicia se podría deber al término francés “franc”; y es que el primer documento que refleja la concesión de una franquicia está fechado en marzo de 1232 y fue localizado en la localidad francesa de Chambey.
Eso sí, cuando llega la Edad Moderna se le pierde la pista al término franquicia en Francia; y ya no se tiene constancia hasta el siglo XXI; y, esta vez, en Estados Unidos.
Sin lugar a dudas, a pesar de toda esta historia, si hay que poner fecha a la aparición de la franquicia, dicha fecha sería el año 1929; cuando General Motors recurre a un contrato que favorece el asociacionismo entre la central; y sus distribuidores, favoreciendo mucho la colaboración entre ambas partes.
A pesar de toda esta aproximación histórica, hay que ofrecer un concepto genérico de franquicia y este podría ser el siguiente; “Acuerdo contractual mediante el cual una compañía matriz (franquiciadora); le concede a una pequeña compañía a un individuo (franquiciador) el derecho de hacer negocios en condiciones específicas”. Este concepto se le debe a Meyer, H, el cual ofrece esta definición en su libro “Marketing; ventas al por menor”.
Ahora, tras ver en qué consisten las franquicias; te vamos a dar una lista con algunas de las ventajas que presentan estos tipos de negocios.
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Dichas ventajas son las siguientes:
Capital de trabajo: cuesta menos dinero operar un negocio de concesión; ya que el franquiciador ofrece al concesionario herramientas para reducir los gastos.
Reputación: el nuevo concesionario no tiene que trabajar para establecer la reputación de la firma.
Asistencia gerencial: el concesionario siempre obtiene asistencia para llevar a cabo su negocio.
Experiencia: el consejo que da el franquiciador compensa la inexperiencia del nuevo propietario.
Motivación: tanto franquiciador como concesionario trabajan, de manera adecuada, para lograr el éxito del negocio; ya que ambos se benefician del mismo.
Utilidades: el concesionario espera un razonable margen de ganancias; porque el negocio se maneja con la eficiencia de las grandes cadenas.
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