En cada nación, en algunas más que otras evidentemente, existe un sistema de bienes y servicios destinado para la población en general, que son de exclusiva responsabilidad del Estado. Nos referimos a la educación, seguridad, vías de comunicación, cuidado del ambiente y del patrimonio cultural, entre muchos otros derechos sociales de cada ciudadano. El hecho es que, el Estado para poder asumir dichos bienes y servicios obligatorios, necesita del beneficio fiscal que recibe de los contribuyentes, dicho de otro modo, de los impuestos. Por tal razón, el pago sobre los impuestos es realmente importante para la manutención de cualquier nación en el mundo. En este sentido, hemos decidido crear este artículo para hablarte del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, un tributo poco conocido pero con gran importancia en nuestro país.
Probablemente, todos alguna vez han escuchado o leído sobre el cobro de una herencia. De hecho, se trata de unas de las ramas del Derecho más antiguas de la humanidad. En el cual, cuando una persona fallece puede transmitir sus bienes, derechos e incluso sus deudas a otras personas, generalmente con algún parentesco consanguíneo o legal, conocido como los herederos. En este caso, los herederos son los que tienen derecho total o parcial de los bienes de una herencia.
Cada país del mundo, maneja el tema de las herencias de manera totalmente diferente y de acuerdo a la cultura o a sus distintas legislaciones. Sin embargo, hay una serie de regulaciones que están muy popularizadas a nivel mundial. Una de esta es el tema del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, se trata de un tributo que debe pagar la persona que recibe un patrimonio a través de la herencia. El mencionado impuesto, está totalmente vigente en una gran cantidad de países. Al menos 27 de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), cuentan con dicha legislación.
¿Qué es y para qué sirve el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones?
Cuando hablamos del Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD), nos referimos a un gravamen que debe pagar una persona o un grupo de persona que van a recibir una herencia por mortis causa, o si bien, por una donación en vida. Si bien es cierto, se trata de dos situaciones diferentes, tanto las sucesiones como las donaciones, se engloban en una misma figura jurídica.
Dicho de otra manera, son los impuestos que deben asumir todas las personas que reciban adquisiciones patrimoniales producto de un fallecimiento, o que sean de carácter donativo realizado por personas vivas.
Es importante mencionar que, la cancelación de este tipo de tributos también será necesario para todas aquellas personas que estén recibiendo una cantidad de dinero procedente de algún seguro de vida, salvo algunos supuestos regulados en la Ley del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y otras Normas Tributarias.
• Características del impuesto
Como veníamos comentando, el ISD deberá ser cancelado por los herederos o beneficiarios de una donación en los primeros 6 meses de haber recibido los bienes. Cabe mencionar que, dicho tributo es totalmente subjetivo, ya que, la cantidad de gravamen será sujeto a evaluación de acuerdo a las circunstancias de cada persona. Dicha evaluación toma en cuenta el tipo de parentesco que hay entre el beneficiario y el donante o difunto. Sin embargo, mientras mayor sea la cantidad recibida o heredada, mayor será el porcentaje a pagar.
Este impuesto, se debe pagar directamente a la Administración Pública, rellenando el formulario otorgado por la Agencia Tributaria. Además, cada comunidad autónoma (CCAA), regulará el ISD de acuerdo a sus normas internas, pudiendo variar el porcentaje a pagar en cada región diferente. Sin embargo, se puede encontrar una tabla para consultar el % para cada caso.
• Normas reguladoras del Impuesto de Sucesiones y Donaciones en España
Comentamos que, en cada país existen diferentes normativas en cuanto al manejo de las herencias. En este caso, en España el tributo está regulado por la normativa estatal, con obligación en todo el territorio español.
El tributo está dispuesto en la Ley 29/1987, de 18 de diciembre del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, con el fin de gravar los incrementos patrimoniales de una persona obtenida de forma gratuita, bien sea por herencia, donación o legado. En caso de que sea una persona jurídica la adjudicaría al incremento patrimonial, el tributo será por el Impuesto de Sociedades específicamente.
Además comentamos que, la gestión de estos tributos están cedidas a las Comunidades Autónomas, quienes regularán el impuesto de acuerdo a sus criterios y características individuales. De hecho, la gran mayoría de las CCAA establecen reducciones o bonificaciones totalmente distintas entre unas y otras.
Un claro ejemplo de esto es, el Impuesto de Sucesiones y Donaciones para Galicia, donde plantean un sistema de deducciones de hasta el 99% en algunos casos para personas incluidas en el el grupo 1 de parentesco que incluye: hijos, padres, cónyuge, hijos del cónyuge y los padres del cónyuge. Así como muchas otras deducciones o bonificaciones totalmente diferentes a de otras CCAA.
• ¿Cómo calcular el Impuesto de Sucesiones y Donaciones para Galicia?
Hemos explicado que, para la Comunidad Autónoma de Galicia existe una normativa totalmente diferente a la de otras CCAA, por lo que calcular el ISD puede ser un tanto complicado. Sin embargo, afortunadamente para nosotros la web ISD Galicia, está especialmente diseñada para entender el funcionamiento del cálculo de dicho impuesto.
Esta web, tiene toda la información necesaria para conocer el funcionamiento del ISD dentro de esa comunidad, además, posee un sistema automático que te permite calcular la base liquidable, con las diferentes variables conformadas por los grupos de parentesco. Con la mencionada calculadora, podrás calcular automáticamente el total de las deducciones, bonificaciones y gravamen a cancelar, sin necesidad de usar tablas u otros elementos un tanto confusos.
Hasta ahora hemos visto que, el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones es totalmente subjetivo y progresivo, por lo que no existe un porcentaje fijo; primero se debe tomar en cuenta la cantidad a recibir por motivo a donación o gerencia. En segundo lugar, el porcentaje de gravamen variará también por las mencionadas bonificaciones de cada CCAA.
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