La preocupación es un elemento muy toxico para los negocios. Si bien es cierto que pensar en el futuro, principalmente cuando estas iniciando un proyecto profesional, te ayuda a tomar medidas ante posibles dificultades; sin embargo, hacerlo en exceso de una forma perturbadora sólo te servirá para desperdiciar tiempo y salud. Justo lo que precisas para estar al frente de tu negocio.

Es fundamental detectar si un inconveniente es importante o urgente o, por el contrario, no tiene relevancia. En este último caso, es preciso evadir las reacciones exageradas y desmedidas. Camina, y toma aire, porque el mundo de los negocios no es un camino de rosas.

Y como la preocupación es toxica en los negocios, te traemos unos consejos que pueden ayudarte para estar más sereno

Sé realista y mantén la calma: Enfrentar el futuro con más positivismo, manteniendo los pies en la tierra es decisivo para tu negocio. Acepta la incertidumbre. Es primordial que aceptes que no estas al tanto de lo que pasará en el futuro, no. Por muy prudente que seas.

Céntrate en el presente: no intentes caer en la anticipación positiva para evitar preocuparte con lo que puede llegar a suceder; tienes que intentar colocar toda tu atención en el hoy y ahora, esto te ayudará a liberar el exceso de la preocupación (clientes, impagos, falta de presupuesto…).

El secreto para alcanzar el bienestar no es llorar por el pasado, inquietarse por el futuro o anticipar problemas; sino vivir en el instante presente conscientemente, dijo Buda.

Al momento de comenzar un proyecto o de llevar corto tiempo en un negocio, los pensamientos absurdos consiguen hacer acto de presencia. Los pensamientos menos inalcanzables que ocurran. ¿Cómo retirarlos para que no afecte tu rendimiento?

Hazte esta pregunta: ¿Qué le dirías a una persona que estuviera preocupada por lo mismo? Si la respuesta es que no tiene sentido ya que es casi del todo imposible que suceda, te autoconvencerás tú también.

La solución a ese inconveniente posiblemente no dependa sólo de ti, pero sí dependerá de la actitud que muestres ante él.

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