Visualízate como un triunfador
Muchas veces se piensa en triunfo y se imagina un gran escritorio, resolviendo asuntos importantes de índole corporativo, tomando decisiones, poseer una gran cuenta con muchos ceros. Sin embargo no nos pasa por la mente todo lo que el triunfo realmente significa.
Existen algunas personas que el éxito les importa poco. Su idea del triunfo consiste en prepararse para escalar una montaña, o andar de mochilero viajando por el mundo entero. Todas estas situaciones son válidas.
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Visualízate como un triunfador
No importan cuales sean tus imágenes de éxito personal. Si puedes cerrar los ojos y visualizarte como triunfador saboreando la victoria de tu esfuerzo, estas en el camino de ser un ganador. Si por el contrario, no te imaginas más allá del sillón de tu casa, cuidado, quizá seas un perdedor y toda tu integridad está en juego.
Ser perdedor es precisamente aquel que carece de metas en la vida. Aquel que es incapaz de fijarse objetivos y desarrollar un esfuerzo para alcanzarlos. El ganador en cambio, es aquel capaz de plantearse metas por increíbles que parezcan. Y ademas desarrolla todas sus capacidades y potencialidades al alcanzarlas.
El deseo de ser un ganador es algo tan natural y elemental como el hambre y el sexo, los especialistas lo denominan la necesidad de autorrealización, ser auténtico ganador. Sin embargo, aunque es una de las necesidades esenciales de todo hombre, se estima que solo el uno por ciento de la población alcanza la autorrealización.
Todos poseemos un instinto de supervivencia que nos hace buscar la seguridad. Vencer el miedo y estar dispuesto a arriesgarse es algo que se debe hacer. Hay que hacerse consciente de aquello que causa miedo, escribir abajo la meta y todo lo que se te ocurra que puedas ganar al conseguir esa meta, allí se vera si vale la pena arriesgarse.