Intraemprendedor, actualmente los trabajadores cobran cada vez más protagonismo en las empresas. El mundo está en constante transformación y las empresas tienen el deber de innovar para no estancarse en el camino. Ya que, gradualmente van involucrando a los empleados en los objetivos de la organización.
De tal manera, que los intraemprendedores son esos empleados comprometidos, capaces de desarrollar nuevas líneas de negocio y sin miedo a asumir responsabilidades. Así como también, profesionales perseverantes, innovadores, entusiastas de su trabajo y sin reservas para impulsar un nuevo negocio por su cuenta y riesgo. En conclusión, emprendedores por cuenta ajena.
Por otro lado, el empresario sabe que contar con estos empleados optimiza notablemente el crecimiento de la empresa. Las ventajas para la empresa son todas: contar con gente atrevida y capaz de pensar por sí sola; que ayuda a diferenciar a su empresa dentro de su sector y hacerla más competitiva.
De este modo, estas empresas ponen a disposición de sus intraemprendedores la estructura que les permite innovar. Les proporcionan herramientas para aportar propuestas; y reservan parte de su jornada laboral a que trabajen en sus propios proyectos. A cambio, por cada iniciativa que ponen en marcha, reciben reconocimientos y recompensas económicas.
Dicho de otro modo, estas empresas están funcionando como si se tratasen de incubadoras. Desarrollan su actividad y conjuntamente trabajan para que sus intraemprendedores cuenten con el entorno adecuado.
Seguramente has oído hablar del famoso 20% de Google. Ese es el tiempo de trabajo del que disponen los trabajadores para salirse de la rutina y pensar en cómo optimizar la compañía.
Aunque el intraemprendedor es un profesional innovador al que le gusta el peligro, no es tan lanzado como el emprendedor que crea su empresa “sin red”; siendo consciente que el fracaso del proyecto puede ser su ruina económica. El intraemprendedor ha decidido formar parte de un proyecto que le asegura el mantenimiento de su puesto, aunque la idea no llegue a tener éxito.
Si la empresa aspira iniciativa y creatividad debe facilitar total libertad a los trabajadores para experimentar. Como cualquier emprendedor, quiere libertad de actuación sin barreras que limiten o cambien el rumbo de la idea de negocio. Esto no significa que trabaje solo, sin supervisión ni apoyo.
Como cualquier idea de negocio, su desarrollo va a precisar de recursos, no solo técnicos o logísticos, también humanos. Aunque en un principio pueda resultar costoso para la empresa ceder parte de sus recursos a un proyecto que no tiene resultados cuantificables, si el proyecto llega a ser una realidad, la recompensa final valdrá la pena.
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